Un bondi a los 90

Me pareció una idea muy interesante, muy útil, mucho más barata en el sentido económico, pero

mucho más valioso espiritualmente hablando.

Conociendo nuestro interior (con todo lo que eso implica) entenderemos el exterior, y seguramente le tengamos más respeto.

Entonces, llevando la cuestión a un ámbito un poco más terrenal te pregunto ¿No te parece que tendríamos que mirar un poco más la caca propia antes que mirar el inodoro del de al lado?

Desde “Un Bondi a los 90” proponemos un ejercicio mental para tratar de generar conciencia sobre el cuidado del medio ambiente: intentemos hacer ese viaje inverso, un viaje hacia el interior… de nuestras cosas.

A vos conductor de cualquier medio de transporte ¿Te gustaría que cuando alguien viaja con vos y abre un paquete de cigarros tire el celofán y el papelito plateado dentro de tu coche? Seguramente no sea de tu agrado. ¡A la tierra tampoco le gusta eso! Como a vos no te gustaría que te vacíen el mate en la alfombra de tu coche nuevo! ¿No? ¡¡Y claro que no!!! ¡A la tierra tamp

oco!

A vos que cuando bajas del Bondi haces un bollito con el boleto y lo tiras en la calle, teniendo a cinco metros un tacho de basura ¿Te gustaría que lo mismo pase en el living de tu casa? ¡A la tierra tampoco!

Y me detengo en vos Papá, Mamá, Tío, Tía. Tutor o encargado que estás leyendo este artículo. Cuando vas a comprarle un caramelo a esos escasos centímetro de persona que te hace exaltar el corazón, en vez de tirar el papelito en el suelo ¿No te parece que estaría báaaaaaaaaarbaro que le enseñes de chiquito para que aprenda las cosas básicas de la vida y ser un adulto responsable, que los papeles no se tiran en el piso?

No olvidemos que los peques imitan todo lo que hacemos los adultos porque creen que somos un ejemplo a seguir, ya que nuestra experiencia determinaría que nuestras actitudes sean las correctas… Así que si nos ven que tiramos basura en el suelo… ¿Te lo explico o ya nos estamos entendiendo?

Hay que explicarles que esos “cosos” que están colgados de los palos de luz, por más que tengan similitud con un policía son tachos de basura. Las mejores enseñanzas, además sobre convivencia en sociedad, además junto con las impulsadas por el Estado son los ejemplos que les damos a nuestros hijos. Si ven una propaganda de “jugá limpio” estaría recontrasuper más que piola que complementemos con nuestra colaboración.

Si los pibes nos ven, nos imitan, y a algún adulto le puede pasar lo mismo. Seguramente, si alguien te ve tirar los papeles en el cesto, esa persona al día siguiente o al instante va a hacer lo mismo….

No nos cuesta nada de nada mantener un poco la limpieza de la cuidad, no te olvides que es de todos.

Te invitamos a hacer este viaje al interior y a pensar en todas las veces que con un sólo movimiento podemos evitar ensuciar nuestra ciudad y cuidar el medio ambiente.

“Un Bondi a los 90” solo intenta aportar un granito de arena a concientizar en la importancia de mantener nuestra cuidad limpia.